viernes, 29 de octubre de 2010

Rumor.





En esta casa de silencios inéditos, donde las camas son siempre blancas y las puertas están abiertas a brisas y a ligeras motas de polvo que saben flotar sobre rayos de luz, donde las noches comienzan pronto y son tan cortas, porque hay largos pasillos de ecos de otros hombres, de otros recuerdos, que vagan. Y yo quisiera que fuese lograr, alcanzar, merecer para solicitar o prender, un instinto nuevo, un soy lo que quiero, o un quiero porque soy.

miércoles, 27 de octubre de 2010

Labios del recuerdo.





A los pasos que vienen del olvido, de ese tiempo que tal vez fue, de ese largo e incontinuo pensamiento dormido, que vela entre sombras casi grises, son tardes inolvidables e inquietas, entre ventanas de cristal, y son largas las esperas y cortos los momentos cuando se viven pendiente y en vilo al borde de otros pensamientos ya casi rotos por no querer aceptar las pequeñas normas de vida.

martes, 26 de octubre de 2010

El último baúl desierto.





Se me olvida los pasados como ayer, los eternos vientos, estos que intentan remover y alejar las hojas mojadas de no sé qué destino incierto. Los antes se inquietan y llaman callados como largas olas que golpean piedras que se alteran por instantes y son falsos los dudosos e imprecisos ojos que no miraron. Solo en tus manos se mueve el tiempo remoto, solo en tus manos los días pasan a tu antojo a tu capricho, y es mi deseo, es solo un anhelo.

lunes, 25 de octubre de 2010

Desafío.






Alguna vez los mismos retos se enfrentan a ellos mismos, tan solo con contender y elegir nombres, que solo son letras que se repiten, son arena aburrida que hace montañas y no se acaba, es la inútil estupidez una elección locuaz y veraz, y el mundo da tumbos de insospechadas cuentas que es girar y girar, y yo pienso que no me muevo, cuando vago y dudo, porque siempre dudo.

viernes, 22 de octubre de 2010

Quién continua.





A las noches perdidas de licor y roces desconocidos, de fondos de búsquedas y apariciones de a veces flotar y pensar sin dormir en selvas cálidas, se quedan colgadas de no sé qué cielo de color perla, de color marfil y olor a maderas de oriente, de cajones sin revolver, de salas largas y amuebladas de lirios altos y juegos eternos, son susurros estos ecos que vuelven en esta cabeza aletargada de algodones, son nombres y arañas de cristal, son pasos los que vuelven en silencio a sobrecoger este pecho y estremece y emociona.

miércoles, 20 de octubre de 2010

Un puerto.





Bajo esa luz que inunda tu sombra larga y redonda, se esconde tránsitos e ilusiones peculiares, entre esa zona que tu propones pasan barcos, que hacen sonar sirenas, hondas y volátiles, en los riscos de tus pensamientos crujen largos los intentos de lograr, de ganar, de alcanzar, minutos, segundos de otra luz.

lunes, 18 de octubre de 2010

Los tiempos de antes.










De como los días son inesperados, son islas verdes y rojas, son lunas redondas y siguen llegando como olas, unas con espuma y desaparecen y son enormes y poderosas, merece pensar en otoños, en lluvias, en otras personas que van a lugares estables y con menos sombras que ayer, los lugares se mueven, unas veces son cálidos y seguros.


Déjame pensar un poco en ti, en como otros tiempos, en mi cuerpo desnudo perdido dentro de sábanas, perdido en reflejos de espejos.

viernes, 15 de octubre de 2010

De como se hace.






Si me cuentas como se acabó, llegaré a pensar en otras playas, iré a otros castillos, me tumbaré en otros valles; si me sigues hablando de como pasan las nubes, esas que tú inventas, esas donde solo tú subes. Y si algún día, un atardecer, una calle, o un no sé, un fondo de algún acéano, un simple tropiezo, sería a veces sentir y esperar a callar, a merecer, a buscar y parar y escucharte.

lunes, 11 de octubre de 2010

Insuficiente.







Una pregunta nunca es suficiente, siempre continúa otra y nunca es conveniente, cada vez son más inoportunas, cada vez son más inadecuadas, y cada vez se entiende menos, porque siempre hay dos orillas y nunca se puede estar en las dos, y cada vez están más lejos una de otra, y más profundas, y pasan fronteras blancas, fronteras negras.
Y por continuar hasta el final hay que marchar, algunas veces hacia delante y otras hacia atrás. Y ya todo ha pasado, cuando vuelve una nueva pregunta. Quién la responderá.

viernes, 8 de octubre de 2010

Radial y redondo.






A lo largo de lo inmenso, eso pequeño y eterno, que no quiere pasar, prefiere instalarse, y vagar y dormir. Eso tan difícil de medir, de identificar, de explicar, de calcular, esa materia tan extraña y querida que se pega a mi piel, a mi mente, y se mezcla en mi boca, en mis manos, entre mis piernas. Esa insondable sensación que corre hondo y profundo, y evoca y presiente y crea todo.

jueves, 7 de octubre de 2010

En cuanto.







Si me cuentas las palabras perfectas, en tu boca seran miel y en mi cuello tus lábios alumbrarán sueños y estrellas. Es ya la hora de los anillos, de movimientos de tierra, de temblores y de piedras dormidas entre él y yo, entre este cuerpo, esta piel desnuda, este momento robado, esta tonta locura de no tenerte. Que ya es muda la inminente sensatez, y evito mi torpe prudencia y no me llega el buen juicio y se perdió el sentido común, y no hay orgullo, porque no hay valor.

miércoles, 6 de octubre de 2010

Algo más lejos.






A las pequeñas fatalidades, que creen en nada, en lo superfluo y efímero de momentos locuaces y tráficos ilimitados, en inviernos antes blancos y luego grices, con nubes y vientos silenciosos, parece la verdad cada vez más falsa, cada vez más lejos de la realidad, esa que te anestesia los sentidos, primero los piés y las manos, y luego la piel.

martes, 5 de octubre de 2010

Callar.










Delicadeza infinita, propuesta por esencias inconsecuentes, tras el sol llega la puerta y no es fatalidad lo que temen mis manos, es abrir pensamientos que me dejan llevar e intensidad de dejarme aumentar cada mañana, cada sueño infinito que tu creas ajeno a lo que me puede dejar largo e insondables e inalterables y yo insolente, inestable e inmenso algunas veces callo.

lunes, 4 de octubre de 2010

Un sabor.







Es mio el suelo que pisaré, todo aquello que mis ojos verán y pasaré las noches buscando y no aparecerá, porque siempre pasa, y quedan los momentos más intensos, quedan sus recuerdos clasificados, embotellados en fraquitos de transparente cristal y brillan de colores distintos, algunos se mueven más que otros.

viernes, 1 de octubre de 2010

Lo que no me atrevo a decir.






Cuando las luces y las olas hacen ballet sobre un cielo de velos negros en el fondo del mar las estrellas montan caballitos de mar.



Sobre una nostalgia se alejan pesadas dudas y puras y livianas sábanas y noches incompletas. Qué es lo que tengo que hacer sobre tus piés, sobre tu pecho, qué pueden hacer mis manos si ya desaparecieron.